martes, 15 de junio de 2010

Historia española del siglo XX

Primero hubo una monarquía,
con su rey y su nobleza,
con sus cotos de caza
y su derecho de pernada,
y sus privilegios eclesiásticos,
y todas esas pamplinas
que tienen las monarquías.
Y los de abajo estaban bien jodidos.
Después llegó la República
y el rey se dio el piro
y vino el Presidente,
y en Cádiz, Asturias,
la Campiña cordobesa,
las fábricas textiles de Cataluña
o los arrabales de Madrid,
los de abajo estaban bien jodidos,
aunque esta vez,
albergaban unas gotitas de esperanza.
Luego llegaron los fascistas
con la dialéctica de las pistolas y las bombas,
y con su (mala) poesía,
alabando el pasado glorioso
y las banderas victoriosas,
e impusieron su dictadura
cuartelera y asesina,
y se quedaron durante una larga temporada
y los de abajo siguieron estando bien jodidos,
y además, cautivos y desarmados.
Pero no hay mal que cien años dure,
como dice el refrán,
así que un buen día,
como quien no quiere la cosa,
el telediario nos dijo,
españoles, la Dictadura ha muerto,
Viva el Rey,
y el Rey volvió a vivir.
El único problema radicaba
en que había un exceso de fachas
y no se sabía muy bien qué hacer con ellos,
así que se inventó un plan para reciclarlos
y se le llamó Transición.
Y los chicos de las camisas azules,
se travistieron de demócratas de toda la vida,
y aquí paz y en los cielos gloria,
y los de abajo, para no variar,
estuvieron bien jodidos, aunque esta vez,
como ya había ocurrido antes,
volvían a albergar ciertas esperanzas.
Y en esto llegó el PSOE,
que ya no era marxista,
pero era postmoderno,
y nos trajo el Mundial de fútbol
con su Naranjito y su Clementina,
y nos trajo la OTAN y el AVE,
y las reconversiones industriales
y el veinte por ciento de desempleo,
y las hipotecas y la biutiful pipol,
y Luis Roldán y Juan Guerra,
y la Movida madrileña y la Expo ’92.
Y resulta que, después de todo,
los de siempre, los de abajo,
continuaron estando bien jodidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.