domingo, 30 de marzo de 2014

Transición española: el cuento de nunca acabar




Yo no sé vosotros pero lo que es yo, estoy hasta la coronilla del cuento de la Transición. Estoy hasta la coronilla de oír hablar de aquel tiempo como de una época de esplendor, como si todo cuanto aconteció en aquellos días hubiese sido una maravilla. Estoy hasta la coronilla de escuchar loas al Rey, a Suárez, a Carrillo, a Felipe González, a Gutiérrez Mellado y a todos los demás que pasaban por allí. Estoy hasta la coronilla de que se hable de estos tipos como si ellos y sólo ellos hubiesen sido los responsables de que ahora, en España, exista esta democracia de cartón piedra. ¡Y qué puedo decir de la Constitución! Estoy hasta la coronilla y un poco más arriba de la Constitución, de sus padres y hasta, si me apuran, de sus tíos. Tras la muerte de Suárez, el bombardeo al que nos han sometido la televisión (cualquier televisión, al fin y al cabo, son todas la misma), la radio (igual de mala y de manipulada que la televisión) y los periódicos (de estos ya mejor ni hablar) ha sido alucinante. Las hipérboles sobre su figura me parecen desorbitadas y eso sin querer quitarle el mérito que tuviera, que también tuvo su parte. Da asco ver a los hipócritas que en 1981 conspiraban contra el entonces Presidente del Gobierno, soltando sus lagrimitas de cocodrilo y contándonos, otra vez, lo buen político que era, lo tolerante, lo bien que se portó con el PCE legalizando a los comunistas, y todo lo demás. Y estos días, la pregunta que me surge es la siguiente: ¿quién se supone que iba a dirigir la Transición, si no era uno de los que formaba parte de la oligarquía franquista? Y la respuesta resulta del todo elemental, mi querido Watson. 
En lo que a mí respecta, lo tengo bastante claro. La Transición no fue cosa de cuatro iluminados, aunque ahora nos los pinten como una especie de súper hombres que no se amedrentaban ante ningún obstáculo, por difícil que pareciera a priori solventarlo. No. La Transición fue un acto colectivo. La Transición la hicieron los jornaleros y jornaleras de mi pueblo y los obreros y obreras de Vigo y del País Vasco. La Transición la hicieron los maestros y maestras de Madrid, de Barcelona, de Cádiz. La Transición la hicieron los chicos y chicas que estudiaban en la Universidad de Salamanca, en la de Valencia, en la de Granada. La Transición la hicieron los panaderos, los albañiles, las amas de casa, las enfermeras, y todos los hombres y mujeres que estaban en el paro, que en aquellos años, como en estos, eran mayoría. La transición la hizo colectivamente el pueblo español, que estaba harto de vivir pisoteado por el fascismo franquista (valga la redundancia), que estaba hasta el moño de las monsergas de los curas y del poder omnipresente de los militares y los demás poderes del estado. Y es que el pueblo español estaba ansioso de vivir como lo hacían los franceses, los alemanes, los holandeses, o los británicos, es decir, con libertad. Y creo que no me equivoco si digo que la puñetera Transición fue posible porque al morirse Franco, el sistema corrupto y asqueroso que se había erigido sobre el terror y la muerte, era completamente inviable. Y creo que me equivoco aún menos si digo que conseguir algo parecido a una democracia costó muchas horas de lucha, muchas manifestaciones, muchas hostias repartidas a diestro y siniestro por la policía, y en definitiva, hubo que pelear mucho. Y eso no fue cosa de Suárez, ni del Rey, ni de los demás que se atribuyen la paternidad de la criatura.      
La teoría general sobre la Transición que se vende desde el establsihment es que aquel período fue maravilloso. Pero no, no lo fue. Fue maravilloso para los que construyeron un sistema político en el que se sentían (aún se sienten) súper cómodos, porque fue un sistema hecho ad hoc para ellos, y porque no tuvieron que rendir cuentas de las mil tropelías que habían cometido durante cuarenta años de dictadura militar, represiva y asesina. Fue maravilloso para todos aquellos fachas del régimen franquista que siguieron a lo suyo, aunque ahora se denominan demócratas, que queda más fino. La Transición (y lo que ha venido después) fue maravillosa para todas aquellas familias que siguieron disfrutando de las riquezas amasadas, del poder económico y del control social que habían conseguido durante los años de la pistola en el cinto y la camisa azul mahón. Empezando por el Mandamás y su familia. Que como ya sabemos, viven del carajo de bien. A los demás nos vendieron una burra de la cual, con el paso del tiempo, fuimos descubriendo que la pobrecita estaba medio ciega, cojeaba de más de una pata, y se derrumbaba a cada paso.  Y ahí seguimos, andando el camino con la pobre burra.
Así que no me vengan con más cuentos sobre la Transición porque lo que es yo, no me los trago.

sábado, 29 de marzo de 2014

II Jornadas Republicanas de Aguilar de la Frontera

El próximo jueves, 3 de abril, comienzan en Aguilar de la Frontera (Córdoba) las II Jornadas Republicanas, organizadas por el grupo municipal de UPOA (Unidad Popular de Aguilar) y en las que colaboran el Ayuntamiento de la localidad, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Aguilar (AREMEHISA), la Fundación Cultural Miguel Hernández, la Asociación de Víctimas del Franquismo 17 de Noviembre, el PCPE y las CJC.
En esta segunda edición, las jornadas tendrán más duración, cuatro días, y más contenidos, ya que a las habituales ponencias hay que añadir la exposición dedicada a la figura del poeta alicantino Miguel Hernández y la Guerra Civil, que se inaugurará en la sala de exposiciones municipal del Molino del Duque, el día 3 de abril y se podrá visitar durante los días que duren las jornadas. Además, el sábado se proyectará la película documental Rojos, 20 historias de represión franquista, de la directora Eva Cortina Quevedo, un viaje emocional desde el Puerto de Alicante, último reducto republicano, a los campos de concentración, pasando por el monte de la guerrilla, las aulas de maestros republicanos, las cárceles o el exilio forzoso de la mano de sus veinte protagonistas, hombres y mujeres desconocidos, que no salen en los libros de historia, pero que sin lugar a dudas son historia viva de unas vidas entretejidas que resaltan por su dignidad.” 
Tras la proyección de la película, se celebrará un coloquio, al que asistirán algunos de los protagonistas de este conmovedor documento de la memoria histórica de nuestro país.
En cuanto a las ponencias, el día 3, es el turno de los historiadores Francisco Gabriel Zurera Álvarez, que hablará sobre Mujer y sociedad en la provincia de Córdoba durante la II República y de Diego Igeño, cuya ponencia versará sobre la Vida cotidiana en Aguilar en los años 30.
El viernes es el turno del escritor Rafael Calero Palma, que disertará sobre La apuesta por la cultura en la II República y de Rafael Espino Navarro, presidente de AREMEHISA, cuya ponencia lleva el título de España, la negación a la justicia a las víctimas del franquismo. Crímenes contra la humanidad.
Todas las ponencias tendrán lugar en el salón de actos del Molino del Duque y comenzarán a las 19:30.
Las jornadas concluirán con una ofrenda floral y una lectura poética que tendrá lugar en el Monumento a los Represaliados del Cementerio de Aguilar (lugar emblemático de la Memoria, ya que en sus tapias, fueron fusilados masivamente muchos aguilarenses, tanto hombres como mujeres, e incluso algunos menores, y vecinos de otras localidades limítrofes, en 1936), que tendrá lugar el domingo, 6 de abril, a las once de la mañana.  

jueves, 27 de marzo de 2014

Estudios. Revista de Pensamiento Libertario, nº 3/2013: “Control y Obediencia”



Hace unas semanas se editó en número 3 de Estudios, Revista de Pensamiento Libertario, nº 3/2013, que publica el sindicato CNT. Este número 3, el del año 2013, se titula : “Control y Obediencia” e incluye un texto mío dedicado a la figura del anarquista Arturo Lodeiro Sánchez, que es uno de los personajes sobre los que ya escribí en mi libro El llanto, la sangre, el fuego.
Si te interesa leer el texto completo sobre este anarquista madrileño que fue fusilado en 1940, puedes hacerlo pinchando aquí. Y puedes leer el resto de la revista, pinchando aquí.  

lunes, 24 de marzo de 2014

Ya disponible "Un mundo lleno de canciones de amor espantosas"





Después de mi último libro, El llanto, la sangre, el fuego (Editorial Alhulia, 2012) vuelvo a las andadas, estos días, con una nueva obra. Se trata de mi octavo libro, una colección de doce relatos titulada Un mundo lleno de canciones de amor espantosas (Editorial Alhulia), (el primero completamente en prosa) en los que hablo de las terribles condiciones vitales a las que han sido arrojadas miles de personas, por culpa del neoliberalismo político y financiero que ha tomado al abordaje nuestro país. 

En la contraportada del libro se puede leer el siguiente texto:

Una inmigrante senegalesa que malvive vendiendo discos y películas piratas, un presentador de televisión alcoholizado y amargado, un ex legionario que se gana la vida como gorrilla, un par de atracadores que perpetran sus robos disfrazados de Aznar y Zapatero, un jubilado llamado Emilio Botín al que el Banco de Santander acaba de desahuciar, una indigente que muere en la calle el día de Navidad, un parado al que ha abandonado su mujer, o un viejo comunista de vuelta de mil batallas, son algunos de los personajes que protagonizan los doce relatos que conforman este libro. Un mundo lleno de canciones de amor espantosas es un certero retrato en blanco y negro de un país, España, que está siendo atacado despiadadamente por el neoliberalismo político y financiero.
Rafael Calero Palma ha hecho una radiografía crítica y mordaz de la sociedad española actual, la de la crisis económica y ética, la de los recortes sociales, la de los desahucios, la del desempleo masivo, la que desprecia a los inmigrantes y a los jubilados, la de la miseria generalizada.

El jueves día 3 de abril estaremos haciendo la primera de las presentaciones del nuevo libro. El acto tendrá lugar en la librería 1616 Books, de Salobreña, a las 19:00 horas. La presentación correrá a cargo de mi amiga María Jesús Castaño, profesora de Filosofía en la Escuela de Artes de Motril. 


El precio del libro es 10 euros (gastos de envío incluidos). Se puede pedir en el correo electrónico rafaelcalero@gmail.com o a través del teléfono 663 05 74 17.